Es desde esta institución donde los abogados pasamos a formar parte del debate nacional, para buscar soluciones a los principales problemas de nuestra sociedad y, sin duda, del gremio.
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Existe la creencia de que lo que ocurre en el Colegio de Abogados es algo que sólo atañe a los profesionales del Derecho. Sin embargo, esto no puede estar más lejos de la realidad. Ello, dado que dicha institución tiene un impacto directo en la sociedad. ¿Por qué? Principalmente por tres razones.
En primer lugar, porque el Colegio de Abogados cumple un rol clave en el acceso a la justicia de todas las personas. Es a través de esta entidad que los profesionales del Derecho pueden impulsar políticas que permitan el acceso igualitario a la justicia. ¿Cómo? Defendiendo la libertad necesaria para que los abogados puedan ejercer su profesión y, por lo tanto, darles la capacidad de representar de forma efectiva los intereses y demandas de las personas independiente de las materias de la asesoría.
El Colegio es “la voz” de nuestros profesionales, lo que nos permite impulsar diálogos con los diferentes actores (sector público, privado y académico) para avanzar en este relevante objetivo. Por ello, es de vital importancia que esta voz sea cada vez más fuerte.
En segundo lugar, el Colegio de Abogados cumple un rol fundamental en impulsar políticas para que las personas puedan acceder a una justicia de calidad. Esto, debido a que es precisamente el Colegio quién establece un marco ético para el ejercicio de la profesión y convoca para dar más herramientas a los abogados y así velar para que hagamos honor a nuestra profesión. Muchos profesionales jóvenes sostienen que es por esa razón que no quieren colegiarse, porque no quieren ser “vigilados”, mientras ejercen su profesión. Sin embargo, esto es muy relevante, ya que el ejercer bajo un marco ético tiene un impacto directo en que las personas puedan tener acceso a asesorías jurídicas de calidad, al mismo tiempo que los abogados crecen como profesionales. Así también, las personas cuentan con un ente al cual recurrir en el caso de que no sea así.
La tercera razón por la que la situación del Colegio de Abogados tiene un impacto directo en la sociedad es que es esta institución la que aboga por que nuestra profesión se actualice acorde a cómo avanza la innovación. La inteligencia artificial, data analytics y otras tecnologías están cambiando la forma de operar en todos los sectores y el Derecho no es la excepción. Ante esto es fundamental acercar y aplicar estos avances a nuestros profesionales, ya que les permitirá potenciar su talento y, por lo tanto, facilitar el acceso de las personas a una justicia más eficiente y de calidad. Y es el Colegio de Abogados el que tiene la fuerte misión de avanzar en este sentido.
Como se puede observar, lo que ocurre en el Colegio de Abogados no es algo que atañe sólo a los profesionales del Derecho, sino que tiene un impacto directo en toda la sociedad. Por eso, es de vital importancia la integración de su Consejo, que éste sea idóneo para justamente convocar a todos y para que vaya avanzando con los cambios que exige la globalización. Ante esto, las elecciones que se realizan por estos días, donde se renovarán nueve consejeros, es algo que nos debe importar a todos.
Es desde esta institución donde los abogados pasamos a formar parte del debate nacional, para buscar soluciones a los principales problemas de nuestra sociedad y, sin duda, del gremio. Por eso es tan relevante que quienes formen parte del Consejo aboguen por el acceso de todos a una justicia de calidad, estableciendo el marco ético necesario, reforzando la libertad de los abogados para ejercer su profesión con pleno respeto y promoción de nuestro Estado de Derecho.
Los desafíos que enfrentamos como país son importantes y es por eso que la colaboración y el trabajo entre el Colegio, el sector público y académico, es más fundamental que nunca para avanzar.
