Quizás uno de los sectores más competitivos del mercado es el de los bufetes de abogados, que de manera constante están buscando ofrecer los mejores servicios a sus clientes y reteniendo al mejor talento humano.
Precisamente esa es la razón por la cual dentro de estas firmas existen figuras que están en permanente rotación. Se trata de los asociados (menor rango) y los socios (mayor cargo).
Por un lado, la figura del socio en una firma puede recibir utilidades y dividendos de la propiedad, porque termina siendo un dueño. Y por el otro lado, los asociados, son empleados que cobran honorarios y participan en los negocios pero no reciben otros derechos.
En cuanto a su lógica, Adriana Hoyos, directora Regional de Gestión Humana de Philippi Prietocarrizosa Ferrero Du & Uría (PPU), explica que “el socio lidera una práctica legal y se consolida como un referente en el mercado; tiene una labor comercial importante y una estrecha relación con los clientes. Mientras que el asociado está desarrollando sus conocimientos y habilidades para proyectarse hacia el cargo de socio”.
PPU, que cuenta con 20 áreas de práctica, tiene actualmente 19 socios y 109 asociados, por lo que es uno de los grandes bufetes con mayor número de incorporados en estas dos figuras.
Otras firmas como Gómez Pinzón cuentan con un total de 19 socios y 102 asociados, mientras que sus áreas de prácticas actuales son 20.
Por su parte Holland & Knight promovió este año a dos senior counsels a ser socios de la firma. Se trata de María Juliana Saa Hoyos que entró al área de Servicios Financieros, y de Inés Elvira Vesga Gaviria, en el área de Energía y Recursos Naturales. Y por el lado de los asociados, en lo corrido de este año la firma a incorporado a ocho personas. Por lo que con estas dos movidas el bufete queda, hasta el momento, con un total de 41 asociados y nueve socios.
En cuanto a las cualidades y criterios de selección para el cargo de socio y asociado, las firmas coinciden en que para ser lo el profesional debe tener un conocimiento amplió y de larga trayectoria en el área laboral en el cual se desempeña, una amplia formación académica, bilingüismo, vocación para el servicio al cliente y reconocimiento en el medio.
Por ejemplo, Holland & Knight especifica que un socio en su firma de tener al menos 12 años de experiencia laboral y una base de datos consolidada; así como tener ciertas cualidades como liderazgo y trabajo en equipo.
Por su parte, los criterios de evaluación para ser un asociado dentro de un bufete oscilan en que debe ser profesional en derecho, ser bilingüe, tener alta calidad jurídica en su trabajo y contar con habilidades para entender las necesidades del cliente y construir relaciones de confianza y apoyo. En Holland & Knight, es clave mantenerse actualizado en la normatividad.
