Durante el día de ayer, domingo 17 de diciembre, se realizó el plebiscito de salida que daría cierre al segundo proceso constitucional. Los chilenos debieron decidir si estaban “A Favor” o “En Contra” de la propuesta de nueva constitución elaborada por el Consejo Constitucional y la Comisión de Expertos.
Fue una jornada tranquila en la que cerca de 13 millones de personas concurrieron a las urnas. Finalmente, la que se impuso fue la opción del “En Contra”, con un 55,76% de las preferencias y con más de 1.400.000 votos de diferencia frente al “A Favor”.
Chile se transforma así en el primer país a nivel comparado que se ha sometido a dos procesos constituyentes seguidos sin que ninguno de estos tuviera por resultado la aprobación de una nueva carta fundamental.
Las consecuencias del “En Contra”
Al no haber sido ratificado el proyecto de nueva constitución, el Capítulo XV de la Constitución actual no contempla ningún otro mecanismo de reemplazo constitucional, por lo que esta seguirá estando vigente de manera indefinida. Por lo anterior, se mantiene vigente la Constitución de 1980 modificada, entre otros, el 2005 durante el gobierno del Presidente Lagos.
Además, los distintos sectores políticos han manifestado que no están disponibles para iniciar un nuevo proceso constitucional, por lo menos en el corto plazo y durante lo que resta del período presidencial actual.
Recordemos, en todo caso, que el año 2022 se reformaron los quórums de reforma a la Constitución vigente, siendo necesario el voto de cuatro séptimos de los diputados y senadores en ejercicio para reformar cualquier capítulo de esta.
Por eso, será necesario estar atentos a las discusiones que se llevarán a cabo en el Congreso Nacional, que vuelve a ser el centro de la negociación política y constitucional.
